HISTORIA DOCUMENTADA DE VILLA SORIANO

Este blog difunde el libro "Los Indios Mansos de la Banda Oriental -Santo Domingo Soriano, documentada", autoría de Wilde Marotta Castro y publicado en 2001. Más de veinte años de investigación y basado en documentación queda confirmado plenamente que Villa Soriano inició su proceso fundacional en 1624, siendo la población más antigua de Uruguay y que siempre estuvo asentada en territorio de la República Oriental del Uruguay. También aportamos nueva documentación. Puedes acceder al libro en www.villasoriano.com .

domingo, 22 de mayo de 2022

ALCALDE ROMERO EN 1707 CONFIRMA LA HISTORIA DE VILLA SORIANO


El texto de la nota: 

Rumbo a los 400 años

                  ALCALDE ROMERO: VILLA SORIANO ANTERIOR A 1647

Agustín Romero escribió en 1707 que Sto. Domingo Soriano tenía más de sesenta años, quiere decir, anterior a 1647, tal como la historia siempre lo afirmó. Documento irrefutable cuyo original existe y que publicara Isidoro de María en 1892 en “Páginas históricas de la República Oriental del Uruguay desde la época del coloniaje, colección de documentos inéditos”.

“Agustín Romero, natural del pueblo, y naturales de Santo Domingo Soriano, y Alcalde en ella...”, comenzaba así el documento dirigido al Señor Gobernador y Capitán General y en donde se pedía el traslado de la población de isla Vizcaíno a tierra firme.

Luego decía: “Lo primero, que habiendo sido uso y costumbre desde nuestra fundación que pasan de sesenta años...”

Como una partida de nacimiento el Alcalde de Sto. D. Soriano Romero confirma la fundación de la población antes de 1647 y en el documento no menciona ningún traslado anterior, como nadie en la serie de documentos e informes acerca del traslado de Villa Soriano. En los trámites se encuentra el documento del Teniente José Gómez, el informe pedido a José Bermúdez que había estado dos veces en Soriano y el decreto de autorización firmado el 22 de marzo de 1708: “atento a ser cierta la relación que esta parte hace, que se halla corroborada con la que ha hecho á este Gobierno el Sargento Mayor don Josef Bermudez, se concede licencia para que puedan mudar el pueblo y Reduccion de Santo Domingo Soriano al paraje contenido en este escrito...”.

LOS ROMERO

Martín (Capitán), Pedro, Domingo y Hernando Romero. Cuatro personas de apellido Romero figuran en demanda contra el Gobernador de Robles por salario que se les debe por trabajos realizados en Sto. Domingo Soriano en 1674 . En una población tan escasa da para pensar en parentesco y en conocimiento de la zona y su historia. Había una tradición oral familiar confirmado en el hecho que Agustín aclara en 1707: “natural del pueblo”, nacido allí.

La demanda fue puesta por el Protector de los naturales Alférez Clemente Rodríguez el 22 de setiembre de 1681. Reclama deudas a indios¨: “Memoria de los Indios de la Redución de Sto. Domingo Soriano de la otra banda que travajaron en faenas por quenta de S. Magestad que Dios guarde y de horden del S. Maestro de Campo Don Andrés de Robles...” La demanda habla de Soriano en “la otra banda” o sea que la sitúa en el hoy Uruguay y confirma su ubicación. También habla de indios entendiéndose así que los Romero lo eran y luego Agustín también lo fuera. Tomamos en cuenta que los Romero serían familia. Además confirma a S.D. Soriano como pueblo de indios.

Los Romero, con su pleno conocimiento, hacen que se confirme la historia de siempre de la Villa.

En el documento figuran también reclamando pagos Pedro, Juan y J. Matheo Morales. Juan Parrado, Diego y Pablo Zacarías, Pedro Gordo, Antonio Berazi, Pedro Carupa, Jacinto y Matheo Cordones, Pedro Gaete, Raymundo, Lucas y Juan Pablo, Francisco Ynambu, Phelipe Cabral, Juan Yngenes, Christoval Guama, Matheo Navarro. Memorial de indios con nombres castellanos.

ÚNICO TRASLADO DOCUMENTADO

Son documentos incuestionables. En el índice de su libro Isidoro de María dice: “traslación del pueblo y reducción de Santo Domingo Soriano, de la Isla donde tuvo origen al paraje que ocupa”, confirmando así también la historia.

El traslado de Sto. D. Soriano se produciría en 1718 en la visita del Obispo Pedro Fajardo. El documento del Archivo de Indias aclara que “entró al pueblo de indios chanás el 6 de mayo, que visitó, y de todo dio buena cuenta el Padre Juan de Cáceres, franciscano, confirmando en él 430 personas”. Este documento también confirma la alternancia de las órdenes religiosas que asistían a Soriano.

Son los únicos documentos de solicitud y autorización de traslado de Soriano, no existen más. La actual Villa Soriano se fundó en 1624 en el habitat natural de los chanás, el entorno de las islas de la desembocadura del río Negro que habitaban desde el comienzo de la era cristiana.

Este documento en cualquier población es una partida de nacimiento. Lo firma un Alcalde y está avalado por el entonces Gobierno de Buenos Aires. Derriba así la hipótesis de nacimiento entrerriano que habla de una fundación en 1664 y así los números no dan.

Tanto se pueden celebrar 400 años de fundación de población relacionada a España como 2.000 años de presencia chaná viviendo en comunidad en la zona, confirmado esto por trabajos arqueológicos.

Federico Marotta



 

lunes, 16 de mayo de 2022

BARRIOS PINTOS, SUS ERRORES DE INTERPRETACIÓN SOBRE LA FUNDACIÓN DE VILLA SANTO DOMINGO SORIANO

Aníbal Barrios Pintos, bandera del revisionismo histórico que da a Villa Soriano una fundación entrerriana, escribió “Santo Domingo Soriano: su nacimiento y desarrollo en tierras entrerrianas y su traslado a la isla del Vizcaíno”.

Para comenzar: no presenta ningún documento de traslado desde Entre Ríos.

Esta es mi discrepancia sobre el trabajo de Aníbal Barrios Pintos (en adelante BP). Mi respeto a su persona, quien supo mantener cordial correspondencia con mi padre pero mis diferencias sobre la historia de Villa Soriano.

REEDIFICAR

Comienza hablando del “hallazgo afortunado” de Flavio García del documento de 1666 “Instrucciones a Juan de Brito...”. BP escribe sobre los 250 pesos para la compra de materiales para edificar la iglesia. No dice que el documento pone “reedificar”, tampoco analiza que 250 pesos de la época no alcanzaban para edificar una iglesia y menos para fundar una reducción. ¿Por qué Barrios Pintos no escribe en su trabajo que el documento original dice “REEDIFICAR la iglesia de la dicha reducción”?

Afirma que Fray Antonio Juárez fue el primer doctrinante pero evita poner “reedificar”. No se puede ser el primer doctrinante porque la iglesia ya estaba construida.

ANTONIO JUÁREZ

BP asegura que Fray Antonio Juárez fue el primer doctrinante de Soriano. El propio Flavio García lo ponía en duda: “dejándonos en la duda de si éste lo fue en el tiempo o lo era o había sido en la jerarquía de ese momento”.

Pero el propio Barrios Pintos informa sobre el documento del Alcalde de Sto. Domingo Soriano Agustín Romero dando cuenta que la población se había fundado antes de 1647. Entonces, ¿por cuál motivo las interpretaciones forzadas?

Estos errores de interpretación del revisionismo sobre Villa Soriano no hacen más que confirmar la historia. Villa Soriano fue fundada en 1624 y va rumbo a sus 400 años.

ALCALDE ROMERO

BP también escribe sobre el documento del Alcalde de Soriano Agustín Romero, fechado en 1707, que dice que la población tenía más de sesenta años pero no comenta nada más. Este único documento escrito por un Alcalde, admitido y confirmado desde Buenos Aires, echa por tierra la “hipótesis entrerriana”.

BUENOS AIRES

Luego BP da cuenta de la versión que Soriano se había fundado treinta años después que Buenos Aires. Dice 1565 y comenta sobre un documento firmado por Benito López de los Ríos que “por los días de 1566 pasó de Buenos Aires a la Banda Oriental del Río de la Plata un Religioso de la Orden de Predicadores” con el intento de reducir a la santa fé católica a los indígenas que se hallaban en ella y habiendo empezado por la costa del río Negro consiguió reducir primeramente a los charrúas...”. Pero esa versión se adjudicaba a 30 años después de la segunda fundación de Buenos Aires, es decir 1580-1610.

Agrega que a la visita de Dámaso Antonio Larrañaga a Soriano en 1815 persistía esa versión de los “treinta años”. BP dice: “en ninguna de estas versiones se menciona que el pueblo hubiera sido fundado en el hoy territorio entrerriano”. A tomarlo en cuenta.

PEDRO LOZANO

Luego BP menciona, sin comentarlo, la versión del historiador jesuita Pedro Lozano, fallecido en 1752. Versión en el tomo tercero de su obra “Historia de la conquista del Paraguay, Río de la Plata y Tucumán” publicada en 1874. Esta versión es la de 1624, fray Bernardino de Guzmán, gobernador Francisco de Céspedes y la presencia de dos religiosos de la orden seráfica (franciscana). Para nosotros Fray Juan de Vergara y Fray Pedro Gutiérrez. BP dice: convirtiendo más de mil almas y fundando tres iglesias. Agrega Lozano que sólo permanecía una, en la reducción de Santo Domingo Soriano en la boca del río Negro”. BP no desmiente la versión de Lozano pero sí desmiente a Domingo Martínez Ordoñana porque daba la fecha de 4 de junio de 1624 como fundación de Villa Soriano y la presencia de los religiosos Villavicencio y Aldao. BP agrega que en 1908 Fray Pacífico Otero demostró documentadamente que Bernardino de Guzmán en 1624 era ministro provincial de Tucumán y Paraguay.

Es cierto que B. de Guzmán no estuvo en persona en la fundación de Villa Soriano (San Francisco de Olivares) pero sí es cierto (documentadamente) que el padre Fray Juan de Vergara llegó a isla Vizcaíno con el poder del padre provincial franciscano B. de Guzmán. Compartimos el debate de la fecha 4 de junio pues Céspedes llegó al río de la Plata en setiembre, convocó a los chanás de isla Vizcaíno a Buenos Aires para ayudar a construir defensas ante un posible ataque holandés y que los chanás pidieron o aceptaron protección para continuar viviendo en paz y comerciando con Buenos Aires, de allí el inmediato mandato a Juan de Vergara.

TRASLADO

Más adelante BP habla sobre el traslado a tierra firme en 1718 y de los documentos de 1707 solicitándolo. Transcribe las palabras del Tte. José Gómez que dice que el pueblo estaba “en una isla baja cercada de cuatro ríos que su mejor hoja de tierra es la que está fundada esta reducción”. No agrega BP que Gómez también escribió “y en el lugar que se pusieron las casas a la orilla del Río en la fundación de este pueblo”. Gómez escribió que el pueblo se había fundado en la isla, BP no lo comenta.

OYARVIDE

BP menciona el relato que recogiera Andrés de Oyarvide en octubre de 1801 a un indio chaná de más de cien años. Éste dijo que por ataques de yaros y bohanes su población había sido trasladada a la isla del Yaguarí de donde había pasado a la del Vizcaíno y de allí al pueblo viejo y en el año cuatro del siglo pasado al pueblo nuevo”. BP dice “versión ésta última inexacta, como ya se dijo” (pero sólo se refiere a lo del año cuatro). Es cierto, Soriano se trasladó a tierra firme en el año 18. Pero BP no desmiente las otras afirmaciones, la tradición oral de un chaná que en 1801 tenía más de cien años. La reducción compartió su habitat con la isla de Yaguarí (la que está pegada a isla Vizcaíno). El chaná pudo equivocarse en el año de mudanza pero sabía perfectamente la historia de Soriano.

BP escribe: “cabe agregar que al final de la isla llamada del Gallego, cercana a la del Yaguarí, según Oyarvide, había entonces faeneros de leña y en sus cercanías un rancho. En la ensenada de esa punta, llamada del Pesquero, hacia el SO y como a una milla, según otras versiones recogidas por Oyarvide, habría sido fundado Sto. Domingo Soriano. Estas interpretaciones vecinales narradas muchos años después de los hechos necesitan para ser concluyentes, del apoyo documental que las haga fehacientes”. ¿Acaso Oyarvide tenía necesidad de mentir? ¿acaso el indio chaná también tenía necesidad de hacerlo? ¿Por qué no se respeta la tradición oral escrita por Oyarvide? Además, y en esto exijo: si se pide apoyo documental fehaciente para confirmar lo escrito por Oyarvide yo reclamo que se pida apoyo documental fehaciente para el que sostiene que Soriano se fundó en Entre Ríos.

MAPAS

Luego BP escribe sobre los mapas de Esmaili e Ibarbelz. Para nada menciona la manipulación cartográfica de la época y las disputas de límites entre España y Portugal. Luego menciona a Lockhart y una disertación de éste en el Instituto “Campos”, que habría expresado (según BP) que mapas del siglo XVII y XVIII le habían sugerido que dicho pueblo había sido fundado en costa argentina quedando sin embargo por descubrir en algún otro documento acta de fundación o constancia directa que nos procure una seguridad completa”. ¿Por qué no se pide aquí ese apoyo documental fehaciente? No existe ningún acta de fundación en Entre Ríos ni ningún documento solicitando traslado a isla Vizcaíno.

DOCUMENTOS

BP menciona a René Boretto Ovalle: “con Boretto mantuvimos conversaciones en las que discutimos nuestros puntos de vista sobre el tema, pues hasta ese momento, pese a las pruebas cartográficas citadas, en mi opinión faltaba encontrar una documentación más precisa y definitiva y era necesario volver a estudiar la conocida hasta ese momento”. BP comienza su trabajo hablando sobre el documento de 1666, base de la “hipótesis Entre Ríos”, ya sabía de él. ¿Qué otro documento se encontró después de este? Fehaciente, como pide BP, ninguno.

YAGUARÍ

BP vuelve a mencionar el documento de 1666 y pegado comenta sobre un documento de 1689 donde se reducen trescientos indios en dos sitios diferentes: Yaguarí Guazú y Yaguarí Miní. En este documento no se menciona a Soriano y no corresponde a su historia.

BP sostiene que Soriano fue instalada en territorio entrerriano sobre el arroyo Yaguarí Miní y posteriormente a la llegada del corregidor Juan de Brito también en Yaguarí Guazú. ¿Cómo se sostiene documentalmente esto en relación a Villa Soriano? Por otra parte, para llamar a confusión el nombre Yaguarí aparece en ambas márgenes del río Uruguay y casualmente junto a la isla Vizcaíno (como isla y corrientes de agua) habiendo documentos que dicen que Soriano estuvo en el paraje Yaguarí. Paraje, no arroyo.

BP escribe que “esos dos establecimientos citados se encontraban “en la otra banda del Paraná” con relación a Buenos Aires, es decir en territorio de la hoy provincia de Entre Ríos”. Agrego yo: “la entrada del río Negro en el Paraná” (según Cédula Real de 1682) más lo escrito por Ulderico Schmidel y Acarete du Biscay más los varios mapas de la época donde se nombraba Paraná al río de la Plata y parte del río Uruguay. Paraná era el río de la Plata, Paraná era su nombre original, dado por los nativos y continuado por los españoles. ¿Por qué esta interpretación forzada? ¿Dónde está lo fehaciente? ¿No cabía al menos el manejo de la duda?

Pero atenuemos con las mismas palabras de BP: “Por cierto, que resultaba muy difícil para el investigador encontrar documentos que atestigüen definitivamente que Santo Domingo Soriano persistió por años, largos años, en dicho lugar. Muchas veces cuando es mencionada dicha doctrina, no se especifica el lugar en el cual estaba situada y en otras ocasiones sólo se dice que se encuentra en la otra banda del río. Pero ¿de qué río? ¿Paraná o de la Plata?”

La “otra banda” o “banda oriental” siempre fue el hoy territorio uruguayo. Se documenta hasta en la propia fundación de Villa Soriano en 1624. Seguidamente analiza documentación de 1680 con la “otra banda” y cruce de ríos.

YRIGUAHI NO ES YAGUARÍ

BP sigue con carta de Naper de Lencastre al rey de Portugal en 1694 sobre conveniencia de conservar Colonia. Refiere “que se podrían hacer grandes daños a las aldeas de los padres de la Compañía de Jesús, impidiéndoles la navegación de sus canoas por el río Yriguahi, que desemboca a 30 leguas de esta Colonia, en la misma desembocadura del río Negro, por donde llevan hacia Buenos Aires todas sus riquezas”. BP pone “Yaguarí” entre paréntesis de “Yriguahi”. Por fonética “Yriguahi” es Uruguay, no Yaguarí. En el acomodo documental afirmamos que esas 30 leguas de Colonia hacia la desembocadura del Uruguay son tomadas en cuenta a consideración que, para la época, el río Negro y el Uruguay desembocaban en el Paraná y que éste era conocido con ese nombre hasta la propia desembocadura del río Negro (recuérdese Cédula real de 1682). No podemos aceptar que Yriguahi sea Yaguarí, es una forzosa interpretación fuera de la verdad histórica.

Por otra parte el documento habla de la navegación de las aldeas del alto Uruguay, por lo tanto no tiene sentido asociarlo con el arroyo Yaguarí del lado argentino porque carece de importancia tal navegación. El daño se haría impidiendo la navegación por el río Uruguay.

Sigue BP analizando otro documento pero concluye: “aunque aún no hemos podido encontrar el documento de época que lo confirme definitivamente, presumimos que en 1702 fue trasladado Santo Domingo Soriano a nuestro territorio (isleño)”. ¿Presumimos? ¿Y el rigor documental? ¿Las pruebas fehacientes son sólo requeridas para la historia tradicional?

MAROTTA

BP escribe luego sobre unos documentos que se hizo mi padre que se basaban en la teoría de una fundación a treinta años de la segunda fundación de Buenos Aires. Mi padre cometió el error de hacerlos públicos antes que le llegara la confirmación científica que esos documentos no correspondían a la época. Aceptó el error y los retiró de su trabajo.

FERNÁNDEZ CABRELLI

Luego BP escribe sobre la opinión del historiador sorianense Alfonso Fernández Cabrelli. Éste confirma la historia tradicional de 1624, la falta de confianza en mapas de la época y la interpretación correcta del documento de 1666, que la otra “banda del Paraná” era el hoy territorio uruguayo y que Soriano estaba en las islas en 1680 como lo documenta la preparación del ataque español a Colonia. BP escribe sobre el pensamiento de Fernández Cabrelli, no lo cuestiona. Pero agrega: “y como existía el propósito expresamente manifestado de eliminar del escudo de Soriano la mención 1624 que lo corona, sostenía Fernández Cabrelli que los postulantes habían olvidado que en realidad lo que se evocaba era la iniciación de las primeras reducciones de indígenas instaladas en nuestro territorio, que constituye el hecho a partir del cual comienzan procesos ininterrumpidos que culminan con la fundación de Santo Domingo Soriano. Como aporte final a su tesis señala la falta de documentación que revele una reacción lusitana ante el traslado hacia 1702 a nuestro territorio de nuestro Santo Domingo Soriano y la falta de noticia y autorización de dicho traslado”.

Tenemos coincidencia con el pensamiento de Fernández Cabrelli. No hay documentos de traslado de Villa Soriano desde Entre Ríos a la isla.

RÍO NEGRO

BP agrega luego: “la oportunidad para regresar al tema del primitivo asentamiento de Santo Domingo Soriano se nos presentó nuevamente ante el estudio histórico de la región rionegrense que hicimos en 1993 y parte de aún no publicado por la Intendencia Municipal de Río Negro -y por tanto de esta tercera población indígena en su territorio isleño- sobre el cual no había aún posición única de los historiadores sobre su origen en territorio entrerriano. Pese a nuestra búsqueda, solamente podemos incorporar a lo que escribimos en noviembre de 1973, pocas informaciones complementarias”. Admite que no se han podido encontrar más documentos pero comenta sobre uno de 1661 en relación a los chanás de Baradero. El revisionismo dice que Soriano se fundó en 1664 con chanás huídos de Baradero en 1651. ¿Qué hicieron esas familias durante trece años? En realidad los chanás volvían a su antigua querencia, Soriano, que siguió existiendo desde que sus antecesores fueron a Baradero.

PEDRO MILLÁN

BP menciona el documento donde en juicio se pregunta al capitán Pedro Millán que había estado en Soriano. A la pregunta “si save que quando la reducción estava situada en el Paraje nombrado Yaguarí Mini no tenían estipendio alguno los dhos curas de aquel pueblo”. Primero que habla de Paraje, no de arroyo Yaguarí Mini. Si hablara de corriente de agua Yaguarí Miní tenemos boca nombrada así entre las islas Vizcaíno y Yaguarí. Recordar la tradición oral del indio chaná que habla de la isla Yaguarí y conocemos documentos donde se menciona a la isla o isleta Yaguarí. La reducción compartió habitat entre las dos islas. Recordar la dispersión sobre 1660 a la llegada de familias guaraníes.

CREDIBILIDAD

Me hace falta en el análisis de Barrios Pintos la credibilidad al Alcalde Romero, la ausencia de referencia al Padre Gregorio Suárez Cordero que escribió con detalle la ubicación de la reducción dominica en la banda oriental, el acta del Cabildo de Buenos Aires para pasar a la otra banda del río grande de este puerto, a la reducción de Santo Domingo Soriano, a indios pampas.

La interpretación documental del revisionismo histórico sobre Villa Soriano necesita, como lo escribiera el propio Barrios Pintos, de pruebas fehacientes como documentos escritos reales que nos den a conocer el traslado desde Entre Ríos a isla Vizcaíno o su acta fundacional en 1664 o el año que propongan cuando se pongan de acuerdo. Sigue sin aparecer ninguno por la simple razón que Soriano jamás estuvo en tierra hoy entrerriana. Pudieron haber otros asentamientos como pudo haber en cualquier otro territorio, pero lo que es Soriano no, jamás estuvo allí.

Si se piden pruebas fehacientes a la verdad histórica, es recomendable pedir pruebas fehacientes al revisionismo. Digo pruebas fehacientes, documentos. No digo interpretaciones. Estamos hablando de la historia de un pueblo que merece respeto.

jueves, 5 de mayo de 2022

VILLA SORIANO EN 1680 - LA PRESENCIA PORTUGUESA EN EL RÍO DE LA PLATA

Villa Soriano en 1680 vive una etapa histórica al recibir un ejército de más de 3.000 personas (mayoritariamente indios) con el propósito de atacar Colonia. Esta etapa histórica y sus documentos confirman, una vez más, la ubicación siempre oriental de Villa Santo Domingo Soriano, como siempre desde su fundación en 1624.



Diario "Crónicas" de Mercedes, Soriano, Uruguay

 

Rumbo a los 400 años

                                                                   VILLA SORIANO EN 1680

La presencia portuguesa en el río de la Plata en 1680 confirma, según documentos, la ubicación siempre oriental de Santo Domingo Soriano. Bien podría considerarse otro pasaje enorme de Villa Soriano la recepción de un ejército de más de 3.000 personas, mayoritariamente indios de las reducciones del alto Uruguay, con el propósito de atacar Colonia.

Los intentos vía diplomacia no dieron sus frutos y el encuentro español-portugués en un barco lusitano volvió a poner en evidencia la acusación mutua en cuanto a la falsedad de los mapas presentados. Portugal aseguraba estar en tierra suya y España lo contrario. Se vendría el ataque.

Manuel Lobo decía que “no podía retirarse hasta tener órdenes de su príncipe (portugués) y que venía a hacer población...” a lo que el Gobernador de Buenos Aires Joseph de Garro “envió órdenes a las ciudades de Corrientes y Santa Fé de la Veracruz para que de una saliera Antonio de Vera Mújica (S.Fé) con 300 hombres y con 50 caballos y de otra con 80 hombres pasase el Maestre de Campo Juan Arias de Saavedra a las doctrinas de dichos Padres y el Maestre de Campo Antonio de Vera Mújica con esta gente y 3.000 indios hiciesen alto junto a la doctrina de Santo Domingo Soriano, la última de los parajes donde se intentan hacer dichas poblaciones...”: “Historia Cía. de Jesús”. Dicho de otro modo el documento sitúa a Soriano en la banda oriental como “última de los parajes donde se intenta fundar Colonia del Sacramento.

En nueva Carta del Gobernador José de Garro al Rey, fechada en Buenos Aires el 29 de mayo de 1680: “... y así dichos yndios son merecedores que se les recompense su lealtad como a Vasallos cuidadosos en el real servicio, y de quienes se espera en adelante iguales diligencias; siendo la de mayor crédito el desempeño de los tres mil yndios que de dichas Doctrinas han bajado al Río Negro, para que con la demás gente española que está prevenida...” Este documento se transcribió en el libro de Jaime Cortesao “Tratado de Madrid, antecedentes, Colonia del Sacramento, 1660-1749”. Los 3.000 indios “han bajado al Río Negro” y se confirma la ubicación oriental de la actual Villa.

AZAROLA GIL

Luis Enrique Azarola Gil en “Los Maciel en la historia del Plata” confirma: Maestre de campo Alejandro de Aguirre. En una información de servicios instruida en abril de 1702 y cuyos documentos originales se custodian en el Archivo Histórico Nacional de Chile: “concurrió al asedio y toma de la fortaleza del Sacramento en 1680 con el tercio correntino incorporándose al ejército hispano-guaraní, en la costa del Río Negro y Santo Domingo Soriano donde en fecha 6 de junio Vera Muxica le expidió el título de Capitán de caballos, cuyo original se halla en el legajo arriba citado”.

DA COSTA REGO MONTEIRO

“A Colonia do Sacramento” de Jonathas da Costa Rego Monteiro, s/doc. Conselho ultramarino, también confirma: “En marzo de 1680 comenzó la movilización española con la partida de las primeras fuerzas, los de Santa Fé el 9 de marzo y los de Corrientes el 20, que después de penosa marcha terrestre atacados continuamente por los charrúas y minuanos, el 30 de mayo reuniéronse en las proximidades de Santo Domingo Soriano en las márgenes del Río Negro, con el contingente venido de Buenos Aires, y los tapes llegados al comando del Cap. Simón de Toledo y los Padres”.

CARLOS PAGE

“Los guaraníes bajaron por el río Uruguay hasta el río Negro donde se hallaba el real en la reducción de Santo Domingo Soriano” en “La presencia de los jesuitas en Colonia del Sacramento” editado en 2014, por Carlos Page, doctor en historia, miembro del Consejo Científico de la Sociedad Internacional de Estudios Jesuitas.

LA OPERACIÓN MILITAR DURÓ MESES

Los documentos del Archivo de Indias narran ese viaje por tierra y agua. Todos debían concentrarse en Sto. D. Soriano.

“De Itapúa debían bajar 190 indios, de Candelaria 200, Santa Ana 85, San Ignacio 150, Loreto 155, Corpus 60, San Carlos 235, San José 90, San Miguel 235, Mártires 80, Santa María 235, San Javier 160, Concepción 275, Santo Tomé 275, Asunción 150, Reyes 150. Los indios a caballo debían ir armados de lanzas, adargas, macanas, capacetes y espuelas. Los de a pie con flechas, arcos, piedras, macanas, machetes y rodelones. Los flecheros de dos arcos, cuatro cuerdas y 30 flechas. Los pedreros han de tener cada uno por lo menos 30 piedras, una docena de hondas, una macana y un cuchillo. De cada pueblo saldrían seis desjarretaderas, 30 cuñas y otros tantos machetes. De cada 100 indios se ha de hacer una compañía de a pie con capitán, alférez, dos sargentos, caja de guerra, su bandera. Las compañías a caballo constarán de 50 soldados con capitán y teniente, estandarte, clarín, chirimía o corneta. Los oficiales de guerra llevarán sus insignias. Los indios llevarán pingollos, pífanos o flautas con que se animen a la guerra. De cada doctrina se escogerán 16 indios, los mejores que manejen los arcabuces. Cada pueblo ha de dar dos balsas de palas y esteras y mucha comida para los indios en maíz, trigo tostado hecho harina y en grano, frijoles y un buen saco de bizcocho para los enfermos. Cada pueblo dará a sus indios la hierba necesaria a razón de 12 arrobas por cada 100 indios, de cada pueblo el tabaco que se pudiere, enfermeros en cada pueblo y medicinas ordinarias, ventosas, lancetas, paños, sal, cuchillos para foguear, azufre, ajos, piedra de San Pablo, miel de abejas y 12 hamacas por lo menos, para los enfermos. Para cada soldado de a caballo se han de asignar tres cabalgaduras: una mula y dos caballos. Se señalarán los sacos de comida y se pondrá el nombre del pueblo donde sale. Los Padres curas alistarán los soldados que les tocan y le enviarán los nombres de ellos, con la firma del Padre, para que él las entregue al Padre que ha de cuidar de todos los indios y al principio de la lista el nombre del cabo”, “Historia de la Compañía de Jesús”.

La operación militar se desarrolló con éxito para el español que, gracias a la valentía indígena y superioridad en número, toma Colonia. “Se dio la batalla y el avance el día 7 de agosto (1680) al amanecer y en el término de casi una hora quedó el fuerte y lo demás edificado por el portugués en poder de los españoles. Murieron en este asalto y toma más de 125 portugueses, quedando prisioneros 150 y 6 mujeres y entre ellos algunos heridos. De los españoles murieron 5 soldados y 31 indios, quedando heridos 11 y 104 indios...”, “Hist. Cía. de Jesús”.

La puja diplomática por Colonia continuaría y Portugal la recupera pero una nueva concentración militar española se repetiría en 1705, recibiendo Villa Soriano esta vez un ejército de más de 5.000 personas.

No fueron hechos de nuestra revolución libertadora, por ello no tiene ese valor histórico que en otras circunstancias se le pudiera dar.

Pero sí vale la pena destacarlo pues lo de “muy noble, leal y valerosa Villa”, título otorgado por la Corona Española en 1802 tenía motivos sobrados. Por otra parte los documentos y más historiadores aquí citados confirman la presencia de Villa Soriano en tierra oriental del río Uruguay en 1680, como siempre desde su fundación en 1624.

Federico Marotta


domingo, 1 de mayo de 2022

FLORENCIA CARLÓN UBICA A VILLA SORIANO EN LA BANDA ORIENTAL

Villa Soriano en la Banda Oriental en 1677 (como toda su vida, siempre oriental). Fuente de información: Archivo General de Indias, Sevilla (AGI). De Florencia Carlón, licenciada y profesora en historia, Universidad Nacional de Mar del Plata. Posee numerosas exposiciones en congresos y publicaciones en revistas científicas. Fue becaria del proyecto: «La violencia como relación social o las reglas para la paz. Europeos y originarios en el Río de la Plata (1580-1650)». Se desempeña como docente en las siguientes asignaturas: Historia Social de Argentina: «Agentes y relaciones sociales en el Río de la Plata (siglos XVI a XVIII)» e «Introducción a la Antropología». Imagen tomada del trabajo “El despertar de la frontera sur pampeana, segunda mitad del siglo XVII) publicado en la Revista de Arqueología Histórica Argentina y Latinoamericana.