Aníbal
Barrios Pintos, bandera del revisionismo histórico que da a Villa
Soriano una fundación entrerriana, escribió “Santo Domingo
Soriano: su nacimiento y desarrollo en tierras entrerrianas y su
traslado a la isla del Vizcaíno”.
Para
comenzar: no presenta ningún documento de traslado desde Entre Ríos.
Esta
es mi discrepancia sobre el trabajo de Aníbal Barrios Pintos (en
adelante BP). Mi respeto a su persona, quien supo mantener cordial
correspondencia con mi padre pero mis diferencias sobre la historia
de Villa Soriano.
REEDIFICAR
Comienza
hablando del “hallazgo afortunado” de Flavio García del
documento de 1666 “Instrucciones a Juan de Brito...”. BP escribe
sobre los 250 pesos para la compra de materiales para edificar la
iglesia. No dice que el documento pone “reedificar”, tampoco
analiza que 250 pesos de la época no alcanzaban para edificar una
iglesia y menos para fundar una reducción. ¿Por qué Barrios Pintos
no escribe en su trabajo que el documento original dice “REEDIFICAR
la iglesia de la dicha reducción”?
Afirma
que Fray Antonio Juárez fue el primer doctrinante pero evita poner
“reedificar”. No se puede ser el primer doctrinante porque la
iglesia ya estaba construida.
ANTONIO
JUÁREZ
BP
asegura que Fray Antonio Juárez fue el primer doctrinante de
Soriano. El propio Flavio García lo ponía en duda: “dejándonos
en la duda de si éste lo fue en el tiempo o lo era o había sido en
la jerarquía de ese momento”.
Pero
el propio Barrios Pintos informa sobre el documento del Alcalde de
Sto. Domingo Soriano Agustín Romero dando cuenta que la población
se había fundado antes de 1647. Entonces, ¿por cuál motivo las
interpretaciones forzadas?
Estos
errores de interpretación del revisionismo sobre Villa Soriano no
hacen más que confirmar la historia. Villa Soriano fue fundada en
1624 y va rumbo a sus 400 años.
ALCALDE
ROMERO
BP
también escribe sobre el documento del Alcalde de Soriano Agustín
Romero, fechado en 1707, que dice que la población tenía más de
sesenta años pero no comenta nada más. Este único documento
escrito por un Alcalde, admitido y confirmado desde Buenos Aires,
echa por tierra la “hipótesis entrerriana”.
BUENOS
AIRES
Luego
BP da cuenta de la versión que Soriano se había fundado treinta
años después que Buenos Aires. Dice 1565 y comenta sobre un
documento firmado por Benito López de los Ríos que “por los días
de 1566 pasó de Buenos Aires a la Banda Oriental del Río de la
Plata un Religioso de la Orden de Predicadores” con el intento de
reducir a la santa fé católica a los indígenas que se hallaban en
ella y habiendo empezado por la costa del río Negro consiguió
reducir primeramente a los charrúas...”. Pero esa versión se
adjudicaba a 30 años después de la segunda fundación de Buenos
Aires, es decir 1580-1610.
Agrega
que a la visita de Dámaso Antonio Larrañaga a Soriano en 1815
persistía esa versión de los “treinta años”. BP dice: “en
ninguna de estas versiones se menciona que el pueblo hubiera sido
fundado en el hoy territorio entrerriano”. A tomarlo en cuenta.
PEDRO
LOZANO
Luego
BP menciona, sin comentarlo, la versión del historiador jesuita
Pedro Lozano, fallecido en 1752. Versión en el tomo tercero de su
obra “Historia de la conquista del Paraguay, Río de la Plata y
Tucumán” publicada en 1874. Esta versión es la de 1624, fray
Bernardino de Guzmán, gobernador Francisco de Céspedes y la
presencia de dos religiosos de la orden seráfica (franciscana). Para
nosotros Fray Juan de Vergara y Fray Pedro Gutiérrez. BP dice:
convirtiendo más de mil almas y fundando tres iglesias. Agrega
Lozano que sólo permanecía una, en la reducción de Santo Domingo
Soriano en la boca del río Negro”. BP no desmiente la versión de
Lozano pero sí desmiente a Domingo Martínez Ordoñana porque daba
la fecha de 4 de junio de 1624 como fundación de Villa Soriano y la
presencia de los religiosos Villavicencio y Aldao. BP agrega que en
1908 Fray Pacífico Otero demostró documentadamente que Bernardino
de Guzmán en 1624 era ministro provincial de Tucumán y Paraguay.
Es
cierto que B. de Guzmán no estuvo en persona en la fundación de
Villa Soriano (San Francisco de Olivares) pero sí es cierto
(documentadamente) que el padre Fray Juan de Vergara llegó a isla
Vizcaíno con el poder del padre provincial franciscano B. de Guzmán.
Compartimos el debate de la fecha 4 de junio pues Céspedes llegó al
río de la Plata en setiembre, convocó a los chanás de isla
Vizcaíno a Buenos Aires para ayudar a construir defensas ante un
posible ataque holandés y que los chanás pidieron o aceptaron
protección para continuar viviendo en paz y comerciando con Buenos
Aires, de allí el inmediato mandato a Juan de Vergara.
TRASLADO
Más
adelante BP habla sobre el traslado a tierra firme en 1718 y de los
documentos de 1707 solicitándolo. Transcribe las palabras del Tte.
José Gómez que dice que el pueblo estaba “en una isla baja
cercada de cuatro ríos que su mejor hoja de tierra es la que está
fundada esta reducción”. No agrega BP que Gómez también escribió
“y en el lugar que se pusieron las casas a la orilla del Río en la
fundación de este pueblo”. Gómez escribió que el pueblo se había
fundado en la isla, BP no lo comenta.
OYARVIDE
BP
menciona el relato que recogiera Andrés de Oyarvide en octubre de
1801 a un indio chaná de más de cien años. Éste dijo que por
ataques de yaros y bohanes su población había sido trasladada a la
isla del Yaguarí de donde había pasado a la del Vizcaíno y de allí
al pueblo viejo y en el año cuatro del siglo pasado al pueblo
nuevo”. BP dice “versión ésta última inexacta, como ya se
dijo” (pero sólo se refiere a lo del año cuatro). Es cierto,
Soriano se trasladó a tierra firme en el año 18. Pero BP no
desmiente las otras afirmaciones, la tradición oral de un chaná que
en 1801 tenía más de cien años. La reducción compartió su
habitat con la isla de Yaguarí (la que está pegada a isla
Vizcaíno). El chaná pudo equivocarse en el año de mudanza pero
sabía perfectamente la historia de Soriano.
BP
escribe: “cabe agregar que al final de la isla llamada del Gallego,
cercana a la del Yaguarí, según Oyarvide, había entonces faeneros
de leña y en sus cercanías un rancho. En la ensenada de esa punta,
llamada del Pesquero, hacia el SO y como a una milla, según otras
versiones recogidas por Oyarvide, habría sido fundado Sto. Domingo
Soriano. Estas interpretaciones vecinales narradas muchos años
después de los hechos necesitan para ser concluyentes, del apoyo
documental que las haga fehacientes”. ¿Acaso Oyarvide tenía
necesidad de mentir? ¿acaso el indio chaná también tenía
necesidad de hacerlo? ¿Por qué no se respeta la tradición oral
escrita por Oyarvide? Además, y en esto exijo: si se pide apoyo
documental fehaciente para confirmar lo escrito por Oyarvide yo
reclamo que se pida apoyo documental fehaciente para el que sostiene
que Soriano se fundó en Entre Ríos.
MAPAS
Luego
BP escribe sobre los mapas de Esmaili e Ibarbelz. Para nada menciona
la manipulación cartográfica de la época y las disputas de límites
entre España y Portugal. Luego menciona a Lockhart y una disertación
de éste en el Instituto “Campos”, que habría expresado (según
BP) que mapas del siglo XVII y XVIII le habían sugerido que dicho
pueblo había sido fundado en costa argentina quedando sin embargo
por descubrir en algún otro documento acta de fundación o
constancia directa que nos procure una seguridad completa”. ¿Por
qué no se pide aquí ese apoyo documental fehaciente? No existe
ningún acta de fundación en Entre Ríos ni ningún documento
solicitando traslado a isla Vizcaíno.
DOCUMENTOS
BP
menciona a René Boretto Ovalle: “con Boretto mantuvimos
conversaciones en las que discutimos nuestros puntos de vista sobre
el tema, pues hasta ese momento, pese a las pruebas cartográficas
citadas, en mi opinión faltaba encontrar una documentación más
precisa y definitiva y era necesario volver a estudiar la conocida
hasta ese momento”. BP comienza su trabajo hablando sobre el
documento de 1666, base de la “hipótesis Entre Ríos”, ya sabía
de él. ¿Qué otro documento se encontró después de este?
Fehaciente, como pide BP, ninguno.
YAGUARÍ
BP
vuelve a mencionar el documento de 1666 y pegado comenta sobre un
documento de 1689 donde se reducen trescientos indios en dos sitios
diferentes: Yaguarí Guazú y Yaguarí Miní. En este documento no se
menciona a Soriano y no corresponde a su historia.
BP
sostiene que Soriano fue instalada en territorio entrerriano sobre el
arroyo Yaguarí Miní y posteriormente a la llegada del corregidor
Juan de Brito también en Yaguarí Guazú. ¿Cómo se sostiene
documentalmente esto en relación a Villa Soriano? Por otra parte,
para llamar a confusión el nombre Yaguarí aparece en ambas márgenes
del río Uruguay y casualmente junto a la isla Vizcaíno (como isla y
corrientes de agua) habiendo documentos que dicen que Soriano estuvo
en el paraje Yaguarí. Paraje, no arroyo.
BP
escribe que “esos dos establecimientos citados se encontraban “en
la otra banda del Paraná” con relación a Buenos Aires, es decir
en territorio de la hoy provincia de Entre Ríos”. Agrego yo: “la
entrada del río Negro en el Paraná” (según Cédula Real de 1682)
más lo escrito por Ulderico Schmidel y Acarete du Biscay más los
varios mapas de la época donde se nombraba Paraná al río de la
Plata y parte del río Uruguay. Paraná era el río de la Plata,
Paraná era su nombre original, dado por los nativos y continuado por
los españoles. ¿Por qué esta interpretación forzada? ¿Dónde
está lo fehaciente? ¿No cabía al menos el manejo de la duda?
Pero
atenuemos con las mismas palabras de BP: “Por cierto, que resultaba
muy difícil para el investigador encontrar documentos que atestigüen
definitivamente que Santo Domingo Soriano persistió por años,
largos años, en dicho lugar. Muchas veces cuando es mencionada dicha
doctrina, no se especifica el lugar en el cual estaba situada y en
otras ocasiones sólo se dice que se encuentra en la otra banda del
río. Pero ¿de qué río? ¿Paraná o de la Plata?”
La
“otra banda” o “banda oriental” siempre fue el hoy territorio
uruguayo. Se documenta hasta en la propia fundación de Villa Soriano
en 1624. Seguidamente analiza documentación de 1680 con la “otra
banda” y cruce de ríos.
YRIGUAHI
NO ES YAGUARÍ
BP
sigue con carta de Naper de Lencastre al rey de Portugal en 1694
sobre conveniencia de conservar Colonia. Refiere “que se podrían
hacer grandes daños a las aldeas de los padres de la Compañía de
Jesús, impidiéndoles la navegación de sus canoas por el río
Yriguahi, que desemboca a 30 leguas de esta Colonia, en la misma
desembocadura del río Negro, por donde llevan hacia Buenos Aires
todas sus riquezas”. BP pone “Yaguarí” entre paréntesis de
“Yriguahi”. Por fonética “Yriguahi” es Uruguay, no Yaguarí.
En el acomodo documental afirmamos que esas 30 leguas de Colonia
hacia la desembocadura del Uruguay son tomadas en cuenta a
consideración que, para la época, el río Negro y el Uruguay
desembocaban en el Paraná y que éste era conocido con ese nombre
hasta la propia desembocadura del río Negro (recuérdese Cédula
real de 1682). No podemos aceptar que Yriguahi sea Yaguarí, es una
forzosa interpretación fuera de la verdad histórica.
Por
otra parte el documento habla de la navegación de las aldeas del
alto Uruguay, por lo tanto no tiene sentido asociarlo con el arroyo
Yaguarí del lado argentino porque carece de importancia tal
navegación. El daño se haría impidiendo la navegación por el río
Uruguay.
Sigue
BP analizando otro documento pero concluye: “aunque aún no hemos
podido encontrar el documento de época que lo confirme
definitivamente, presumimos que en 1702 fue trasladado Santo Domingo
Soriano a nuestro territorio (isleño)”. ¿Presumimos? ¿Y el rigor
documental? ¿Las pruebas fehacientes son sólo requeridas para la
historia tradicional?
MAROTTA
BP
escribe luego sobre unos documentos que se hizo mi padre que se
basaban en la teoría de una fundación a treinta años de la segunda
fundación de Buenos Aires. Mi padre cometió el error de hacerlos
públicos antes que le llegara la confirmación científica que esos
documentos no correspondían a la época. Aceptó el error y los
retiró de su trabajo.
FERNÁNDEZ
CABRELLI
Luego
BP escribe sobre la opinión del historiador sorianense Alfonso
Fernández Cabrelli. Éste confirma la historia tradicional de 1624,
la falta de confianza en mapas de la época y la interpretación
correcta del documento de 1666, que la otra “banda del Paraná”
era el hoy territorio uruguayo y que Soriano estaba en las islas en
1680 como lo documenta la preparación del ataque español a Colonia.
BP escribe sobre el pensamiento de Fernández Cabrelli, no lo
cuestiona. Pero agrega: “y como existía el propósito expresamente
manifestado de eliminar del escudo de Soriano la mención 1624 que lo
corona, sostenía Fernández Cabrelli que los postulantes habían
olvidado que en realidad lo que se evocaba era la iniciación de las
primeras reducciones de indígenas instaladas en nuestro territorio,
que constituye el hecho a partir del cual comienzan procesos
ininterrumpidos que culminan con la fundación de Santo Domingo
Soriano. Como aporte final a su tesis señala la falta de
documentación que revele una reacción lusitana ante el traslado
hacia 1702 a nuestro territorio de nuestro Santo Domingo Soriano y la
falta de noticia y autorización de dicho traslado”.
Tenemos
coincidencia con el pensamiento de Fernández Cabrelli. No hay
documentos de traslado de Villa Soriano desde Entre Ríos a la isla.
RÍO
NEGRO
BP
agrega luego: “la oportunidad para regresar al tema del primitivo
asentamiento de Santo Domingo Soriano se nos presentó nuevamente
ante el estudio histórico de la región rionegrense que hicimos en
1993 y parte de aún no publicado por la Intendencia Municipal de Río
Negro -y por tanto de esta tercera población indígena en su
territorio isleño- sobre el cual no había aún posición única de
los historiadores sobre su origen en territorio entrerriano. Pese a
nuestra búsqueda, solamente podemos incorporar a lo que escribimos
en noviembre de 1973, pocas informaciones complementarias”. Admite
que no se han podido encontrar más documentos pero comenta sobre uno
de 1661 en relación a los chanás de Baradero. El revisionismo dice
que Soriano se fundó en 1664 con chanás huídos de Baradero en
1651. ¿Qué hicieron esas familias durante trece años? En realidad
los chanás volvían a su antigua querencia, Soriano, que siguió
existiendo desde que sus antecesores fueron a Baradero.
PEDRO
MILLÁN
BP
menciona el documento donde en juicio se pregunta al capitán Pedro
Millán que había estado en Soriano. A la pregunta “si save que
quando la reducción estava situada en el Paraje nombrado Yaguarí
Mini no tenían estipendio alguno los dhos curas de aquel pueblo”.
Primero que habla de Paraje, no de arroyo Yaguarí Mini. Si hablara
de corriente de agua Yaguarí Miní tenemos boca nombrada así entre
las islas Vizcaíno y Yaguarí. Recordar la tradición oral del indio
chaná que habla de la isla Yaguarí y conocemos documentos donde se
menciona a la isla o isleta Yaguarí. La reducción compartió
habitat entre las dos islas. Recordar la dispersión sobre 1660 a la
llegada de familias guaraníes.
CREDIBILIDAD
Me
hace falta en el análisis de Barrios Pintos la credibilidad al
Alcalde Romero, la ausencia de referencia al Padre Gregorio Suárez
Cordero que escribió con detalle la ubicación de la reducción
dominica en la banda oriental, el acta del Cabildo de Buenos Aires
para pasar a la otra banda del río grande de este puerto, a la
reducción de Santo Domingo Soriano, a indios pampas.
La
interpretación documental del revisionismo histórico sobre Villa
Soriano necesita, como lo escribiera el propio Barrios Pintos, de
pruebas fehacientes como documentos escritos reales que nos den a
conocer el traslado desde Entre Ríos a isla Vizcaíno o su acta
fundacional en 1664 o el año que propongan cuando se pongan de
acuerdo. Sigue sin aparecer ninguno por la simple razón que Soriano
jamás estuvo en tierra hoy entrerriana. Pudieron haber otros
asentamientos como pudo haber en cualquier otro territorio, pero lo
que es Soriano no, jamás estuvo allí.
Si
se piden pruebas fehacientes a la verdad histórica, es recomendable
pedir pruebas fehacientes al revisionismo. Digo pruebas fehacientes,
documentos. No digo interpretaciones. Estamos hablando de la historia
de un pueblo que merece respeto.